prensa fuera de cuadro


por Verónica Pagés

Fuera de cuadro: cuando los miedos y los dolores salen de paseo

Nuestra opinión: muy buena
"¿Qué le dice una persona a otra? ¿Cómo está usted? Si se diera la locura de la franqueza, ¿qué se dirían las personas unas a otras? Y peor, ¿qué se diría una persona a sí misma? Yo conmigo no hablo. No quiero contarme ni a mí misma ciertas cosas de mí misma".

La poesía fresca, absurda, sensible, alocada, pero también intensa y magnética de Clarice Lispector sale a escena de la mano de Jimena Angeletti, la actriz que eligió Deby Wachtel para este Fuera de cuadro, en el que una mujer habla con el público para hablar consigo misma. Dialoga, pero no espera contestación, y si la hay es porque ella misma la genera. Y en esa respuesta duda, saca sus miedos y sus dolores de paseo, pero también hace desfilar sus alegrías, fantasías y milagros.

De palabras, silencios, ruidos y algo de música está hecha esta propuesta pequeña, sensible, divertida y bella (todas características que suele poner en juego Wachtel en sus trabajos con absoluta comodidad).

Su actriz es perfecta para el desafío. Tiene la ductilidad necesaria para pasar de un estado a otro en apenas segundos. Tiene una mirada que a veces va a contramano de lo que dicen sus palabras, lo que provoca dulzura e hilaridad. En su largo monólogo logra crear climas y sensaciones diferentes, todas sinceras, orgánicas, sorpresivas. Y en esto tienen mucho que ver las dos músicas que la acompañan en escena. Juliana Moreno, en flauta traversa, y Fabiana Galante, en piano, siguen el ritmo de la narración, el de las palabras y, por momentos, crean un diálogo propio con la actriz que va completando sentidos o creando nuevos.
Todo está cuidado hasta el último detalle. La iluminación de Mili Chain, el vestuario, el maquillaje, la mínima escenografía, los dos o tres objetos que hay en escena. Nada está colocado al azar o llenando un vacío. Al contrario. Wachtel no les teme a los vacíos. Si están es porque algo nos están diciendo. Lo dicho, pequeña, sensible, divertida y bella es esta obra que homenajea a la escritora brasileña que se pregunta: "¿Dónde me llevará esta libertad mía?". Y no hace faltan respuestas.
Aclaración: Pista Urbana Bar, como dice su nombre, es un bar, lo que significa que la obra siempre empieza un poquito después de las 18.30 para que el público tenga tiempo para pedir alguna consumición, o no.



por Daniel Gaguine

El sentir de la palabra. La misteriosa y fresca pluma de Lispector es llevada por Jimena Angeletti que cautiva con su decir. Ataviada con un vestido que brinda ese aire de libertad que emanan las palabras del texto, Angeletti da cuenta de diversas vivencias de una mujer que pregunta e inquiere pero sin quedarse en un rol pasivo. Ella viaja dentro de si misma y su personalísima forma de ver el mundo.En la relación que establece con la música, se completa el planteo de una puesta tan sencilla como emotiva. El acompañamiento de piano y flauta crean una atmósfera exacta para cada uno de los momentos que se plantean. La pasión y la reflexión, el desborde y la contención. Todo entra en este mundo creado de palabras y sensaciones que llevan la impronta de la reconocida escritora brasilera.“Fuera de cuadro” es un sutil y sentido homenaje a la obra de Clarice Lispector. Apto para quienes conocen su obra como para aquellos que desean adentrarse en una pluma tan cautivante como original.La excusa es realizar un más que merecido homenaje a esa gran escritora llamada Clarice Lispector. Pero hay que tener conocimiento y buen gusto para llevarlo a cabo de tal manera que conforme un momento por demás placentero y no un simple recitado de textos. Al respecto, se encarga Deby Watchel que ideó y dirige una puesta que combina palabras y música.Será en ese preciso instante en que uno se percata que no vuela una mosca. La concentración es absoluta y se percibe qué frase o palabra impacta en los espectadores. El pequeño sonido de una sonrisa cómplice o triste sonará con la sutileza que requiere el ambiente. El texto establece un diálogo tan personal como único, que derribará todas las barreras defensivas que se levantan con tal de no oir aquello que ya se sabe pero se teme expresar.